A veces ni nosotros mismos nos reconocemos ante el espejo. |
Me despierto, y voy directa al espejo. Me miro, y descubro que ya no soy la de antes, he cambiado, todo ha cambiado.
He cambiado, ahora tengo más cara de mujer, ya no parezco tan niña, mi inocencia la perdí ya hace tiempo, ya no soy tan ilusa, solo finjo serlo...
Ha cambiado también mi alrededor, faltan seres que me han acompañado desde niña, y que en ese momento pensaba que sin ellos no sería nada, y aquí estoy.
Me afecta todo menos, soy más insensible, más difícil de impresionar, ... Sigo siendo la chica buena que hace favores a la gente pensando que eso les ablandará y les incitará a cambiar a mejor, pero ya simplemente lo hago por costumbre, se que no cambiará, la gente no cambia, la gente mala, morirá mala, y si ven que alguien les hace favores, se aprovechará absorbiéndole hasta la última gota de humildad que haya.
He cambiado, ahora tengo más cara de mujer, ya no parezco tan niña, mi inocencia la perdí ya hace tiempo, ya no soy tan ilusa, solo finjo serlo...
Ha cambiado también mi alrededor, faltan seres que me han acompañado desde niña, y que en ese momento pensaba que sin ellos no sería nada, y aquí estoy.
Me afecta todo menos, soy más insensible, más difícil de impresionar, ... Sigo siendo la chica buena que hace favores a la gente pensando que eso les ablandará y les incitará a cambiar a mejor, pero ya simplemente lo hago por costumbre, se que no cambiará, la gente no cambia, la gente mala, morirá mala, y si ven que alguien les hace favores, se aprovechará absorbiéndole hasta la última gota de humildad que haya.
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